La espera ha terminado, y es que Apple ya ha lanzado la beta pública de macOS Tahoe, justo antes de su estreno oficial en otoño. Pero, ¿realmente deberíamos lanzarnos a instalarla en nuestros Macs? En este artículo te contamos todo lo que necesitas saber para tomar una decisión informada.
¿Merece la pena arriesgarse?
Con macOS Tahoe llega un rediseño impresionante que promete revolucionar nuestra experiencia. La nueva interfaz Liquid Glass, sumada a funciones como la app del teléfono en el Mac, nuevas acciones en Spotlight y un centro de control personalizable, hacen que esta beta suene tentadora. Pero cuidado, no todo es color de rosa: al ser una versión beta, los fallos están a la orden del día. Apple recomienda encarecidamente no instalar estas actualizaciones en nuestro equipo principal. Si tienes otro Mac por casa, ¡adelante! Pero si no, quizás sea mejor esperar al lanzamiento definitivo.
Compatibilidad y precauciones
Antes de lanzarte a probarlo, asegúrate de que tu Mac sea compatible. Aquí van los modelos aceptados: MacBook Air y Pro con silicio Apple (2020 en adelante), así como varios otros modelos más recientes. Ojo con los antiguos: muchos han quedado fuera del juego.
No olvides hacer una copia de seguridad con Time Machine antes de proceder a la instalación; es vital tener un plan B si algo sale mal.
Si decides seguir adelante, simplemente regístrate en el programa beta desde la web de Apple, acepta los términos y ve a Ajustes del Sistema. Busca las Actualizaciones Beta, selecciona macOS Tahoe 26 Public Beta, y dale al botón de actualizar. Así de sencillo: tu Mac hará el resto y pronto estarás disfrutando del nuevo sistema.
