En el mundo de la tecnología, siempre hay algo nuevo en el horizonte, y esta vez la noticia llega de la mano de Apple. Su primer iPhone plegable está a la vuelta de la esquina, y según un conocido filtrador chino que ha hecho ruido en Weibo, se quedará sin el tradicional slot para SIM. Todo parece indicar que este dispositivo apostará únicamente por la tecnología eSIM.
Se espera que el lanzamiento del denominado «iPhone Fold» ocurra a finales del próximo año o principios de 2027. Hablamos de un gadget que promete revolucionar el mercado con una pantalla exterior de 5.5 pulgadas y un diseño similar al de un libro que se abre para descubrir una impresionante pantalla interna de aproximadamente 7.8 pulgadas, parecida a la del iPad mini.
¿Realmente estamos listos para dejar atrás las SIM físicas?
Mark Gurman de Bloomberg no se ha quedado atrás al describir este dispositivo como «súper delgado y un logro en diseño», comparándolo incluso con «dos iPhones Air de titanio uno al lado del otro». Sin embargo, aquí es donde comienza el dilema: el abandono del slot para SIM puede ser problemático en China, donde muchos usuarios aún prefieren activar sus servicios mediante tarjetas SIM físicas y mantener múltiples líneas sin complicaciones.
Aunque Apple es consciente de estos obstáculos, con su modelo anterior, el iPhone Air, también apostando por la eSIM debido a razones similares relacionadas con el espacio, los problemas persisten. Para activarlo hay que ir a una tienda física, lo que complica aún más las cosas en un país donde las transferencias rápidas son esenciales.
Nuevas tecnologías y precios desorbitados
A nivel global, las ventas del iPhone Air han sido más decepcionantes de lo esperado; muchos usuarios se han fijado menos en su perfil estilizado y más en los sacrificios que implica: batería reducida y una única cámara trasera. En China, esta limitación asociada a la eSIM podría generar dudas adicionales entre los consumidores.
Pese a todo esto, se rumorea que este nuevo iPhone plegable incorporará innovaciones sorprendentes como una cámara bajo-display de 24 megapíxeles y un panel interior sin pliegues. Apple confía en estas mejoras para superar las preocupaciones sobre su usabilidad, especialmente en mercados donde aún no se ha adoptado ampliamente la eSIM.
¿Y qué hay del precio? Las estimaciones apuntan entre $2,000 y $2,500, lo cual podría convertirlo en el iPhone más caro hasta ahora. Así que habrá que ver si vale realmente lo que cuesta o si nos están preparando otra jugada maestra cuestionable.
