En el mundo de los monitores, Apple ha tenido siempre un puesto privilegiado, pero las cosas están cambiando. La llegada del BenQ PD2730S ha desatado una competencia que muchos no veían venir. Este monitor de 27 pulgadas promete colores siempre precisos y consistentes a un precio que no asusta: $1,199, mucho más asequible que los más de $1,600 del Studio Display de Apple.
Un Diseño Que Cumple
No vamos a engañarnos; el PD2730S no tiene la estética de aluminio pulido que caracteriza a Apple. Pero eso no significa que sea feo. Su diseño combina elementos en negro, blanco y plata de forma armoniosa. Las esquinas son agradables al tacto y el soporte es robusto; incluso se siente sólido cuando ajustas su posición, algo raro en este rango de precios.
Conectividad y Funcionalidades Destacadas
Donde este monitor realmente brilla es en la conectividad. Con un puerto Thunderbolt 4 que ofrece 90W para cargar tu MacBook Pro y múltiples opciones como HDMI 2.1 y USB-C, nunca te sentirás limitado. Además, incluye un controlador HotKey Puck G3 que permite acceder rápidamente a las configuraciones sin complicaciones.
A medida que lo he probado junto al Studio Display, me he dado cuenta de lo bien que gestiona el color; cubre el 98% del espacio P3, esencial para trabajos creativos. Y aunque su brillo máximo llega a 400 nits (un poco menos que los 600 nits de su competidor), sigue siendo suficiente para la mayoría de entornos laborales.
En resumen, si buscas un monitor potente sin arruinarte, el BenQ PD2730S se presenta como una opción muy sólida para creativos. Con un equilibrio notable entre rendimiento y precio, merece ser considerado seriamente por quienes quieren lo mejor sin romper el banco.