El mundo de la tecnología está en constante movimiento y, como siempre, Apple no es la excepción. Según el analista de Bloomberg, Mark Gurman, la compañía tiene un plan multifacético para hacer frente a los inminentes aranceles que se avecinan. Y claro, estos no solo afectarán a su producción en China; también tocarán a países donde Apple ha intentado diversificar su fabricación.
Los números no mienten
Los nuevos aranceles van desde un 20% hasta un impactante 46% dependiendo del lugar de fabricación. Por ejemplo, en India, donde ya se producen iPhones y AirPods, el impuesto será del 26%. Pero no se queda ahí; Vietnam, que fabrica desde iPads hasta Macs, sufrirá una carga del 46%. A esto se suman otros países como Malasia y Tailandia con tarifas entre el 20% y el 37%. Sin duda, estos son números que hacen pensar.
Estrategias para sobrevivir
Gurman cree que Apple tomará varias medidas para mitigar este impacto. Primero, seguramente presionarán a sus proveedores para que ajusten precios hacia abajo. En segundo lugar, podrían absorber parte de los costes adicionales, lo cual podría afectar sus márgenes de beneficio. Pero aquí viene lo más preocupante: podrían tener que ajustar los precios de los iPhones.
Ya hemos visto cómo han incrementado precios en otros mercados debido a políticas fiscales y fluctuaciones monetarias. “Espero que Apple considere seriamente ajustar los precios de sus iPhones”, comenta Gurman. Y es que muchos consumidores ya están al tanto de estas circunstancias externas y quizás no verán esto como un intento desesperado por sacar más dinero.
Además, parece que la compañía intensificará sus esfuerzos por diversificar su cadena de suministro. Aunque trasladar la producción a Estados Unidos no será rápido ni fácil, podrían optar por enviar más unidades desde India en vez de depender únicamente de China.
Aparte, Apple ha estado acumulando inventario en EE.UU., anticipándose a estos aranceles, lo cual podría retrasar cualquier aumento de precio hasta el lanzamiento del iPhone 17 en septiembre. Las unidades ya presentes allí estarán exentas hasta el 9 de abril.
A pesar del esfuerzo del CEO Tim Cook por establecer buenas relaciones con Trump –asistiendo incluso a su inauguración e invirtiendo $500 mil millones en EE.UU.– aún no han conseguido ninguna excepción ante estas tarifas tan agresivas.
Para quienes temen pagar más por un nuevo iPhone este otoño, Gurman sugiere que Apple podría volverse más agresiva con ofertas comerciales o planes a plazos para compensar posibles aumentos. O tal vez revivir esa idea antigua sobre servicios de suscripción para hardware.
Aún sin comentarios oficiales por parte de Apple sobre estos aranceles o su estrategia futura, seguro están trabajando arduamente entre bastidores para evaluar todos estos efectos.
*Nota: Debido al carácter político y social del tema tratado aquí, la discusión se lleva a cabo en nuestro foro sobre noticias políticas.*