La experiencia con los relojes Pixel Watch 3 ha sido un verdadero calvario para muchos, y yo soy uno de ellos. Desde hace más de un mes, tengo dos unidades que siguen atrapadas en una antigua actualización de noviembre de 2024. Cada vez que intento forzar la actualización, me siento como si estuviera hablando con una pared. ¿Por qué Google no puede gestionar esto mejor?
Un ciclo interminable de promesas
Google asegura que las actualizaciones se implementarán en fases, pero lo único que hemos visto es retrasos y más retrasos. La última publicación comunitaria menciona que aquellos que no recibieron la primera actualización tendrán que esperar «unas semanas más». En resumen, a medida que avanza el tiempo, nuestra impaciencia crece y la esperanza se desvanece.
Actualizaciones confusas y poco claras
Parece absurdo tener que estar tocando la pantalla frenéticamente para verificar si hay nuevas funciones disponibles, cuando debería haber un sistema sencillo para comprobar actualizaciones desde el teléfono. Con cada día que pasa sin novedades significativas, mi entusiasmo inicial por Wear OS 5.1 se convierte en puro desencanto. La idea original era buena: tener lanzamientos trimestrales con nuevas características; pero ¿de qué sirve si nunca llegan a tiempo?
La realidad es dura: quienes adquirieron estos dispositivos premium están viendo cómo otros modelos reciben atención antes que ellos. Nos sentimos ignorados y eso simplemente no es aceptable en un producto por el cual hemos pagado tanto.