Frecuentemente se evidencia el afán del humano por avanzar. Por crecer cada vez más y crear mejores herramientas que faciliten su vida. Y eso es una de las razones por la que ha llegado a ser lo que es hoy, pero no solo eso.
El estudio del pasado, en particular a través de la arqueología, nos ha dado pistas muy importantes sobre el desarrollo de la especie y sobre cómo se vivía en épocas pasadas.
Asimismo, y para mayor beneficio del hombre, el estudio de los restos físicos del pasado se nutre del avance tecnológico.
Conocimientos imposibles, ahora al alcance
Gracias a las innovaciones tecnológicas en materia de arqueología es posible determinar hasta el dato más específico. Los isótopos estables, por ejemplo, hoy en día permiten estudiar la composición de los huesos al punto de establecer cuál era la dieta de esa persona. Esto ha permitido establecer relaciones notables entre dieta y desplazamientos, clase social, etnia…
Asimismo, la teledetección, las fotografías satelitales y las termocámaras son herramientas vitales en el trabajo arqueológico de la actualidad. Esto se debe a las facilidades modernas para geolocalizar ruinas, determinar su origen y establecer complejos trazados de civilizaciones antiguas. Muestra de ello es que hoy, desde una vista satelital, se puede establecer con precisión dónde estaban algunas ciudades de pueblos que ya no existen, como los mayas o incas.
El trabajo arqueológico, como cualquiera trabajo científico, es eminentemente compartido y globalizado, capaz de nutrirse de cualquier lugar del mundo. En ese sentido, el Grupo Thales América Latina ha desarrollado un software en Brasil y Bolivia destinado a organizar, compilar y manipular grandes cantidades de información arqueológica.
Esos datos resultan invaluables para cualquier proyecto futuro, ya sea en la región o fuera de ella. Asimismo, a efectos de exhibición, la forma en la que es presentada la información puede constituir la diferencia entre una exposición arqueológica aburrida y un viaje dinámico e interactivo al pasado.
En la arqueología, uno de los puntos más relevantes en cuanto a su comunión con la tecnología es la protección y conservación de los restos arqueológicos
Otro punto importante en este tema es el relacionado con la debida protección de los restos arqueológicos. Aquí la tecnología juega un rol determinante ya que para incorporar sistemas modernos e innovadores que ayuden a identificar y registrar de forma segura y rápida la totalidad de sitios y restos, es necesaria la tecnología de punta.
Por ejemplo, la utilización de drones conectados a cámaras de la más alta resolución, los cuales a su vez están conectados a un sistema informático, permite capturar las llamadas ortofotos, las cuales capturan de forma detallada la situación de los restos arqueológicos y además incluyen información georreferenciada que ayuda a identificar y localizar el sitio de forma exacta.
