En un giro que ha levantado pasiones, Instagram ha comenzado a probar un botón de ‘no me gusta’ para los comentarios. Adam Mosseri, la cabeza visible de la plataforma, lo confirmó recientemente. La idea detrás de esta nueva función es permitir que los usuarios puedan expresar, de manera privada, su desacuerdo con ciertos comentarios. Una especie de señal sutil que busca suavizar el ambiente en las conversaciones digitales.
Un intento por mejorar la experiencia
Mosseri señala que esto es solo una prueba inicial, pero están comprometidos a hacer que los comentarios sean más amigables. Si este experimento resulta exitoso, podría implicar un cambio significativo: los comentarios menos queridos podrían bajar en la jerarquía de visibilidad dentro del hilo de discusión. En otras palabras, aquellos comentarios que no resuenen bien entre los usuarios tendrían menos protagonismo.
Un paso hacia el control personal
No se trata de contar cuántas veces alguien le da al ‘no me gusta’, ni tampoco los demás podrán ver si han sido objeto de desagrado. Este gesto se queda dentro del ámbito privado y no se hace visible a otros usuarios. Un portavoz de Instagram comentó a TechCrunch que están trabajando para dar más control a sus usuarios sobre lo que ven en la aplicación. Actualmente están testeando esta opción con un grupo reducido; eso sí, quienes tengan acceso verán una flecha hacia abajo junto a cada comentario en Reels o publicaciones del Feed.
Así que ahí lo tienen, amigos: Instagram está explorando nuevas formas de hacernos sentir más cómodos en sus espacios digitales. ¿Lograrán realmente cambiar la cultura tóxica que a veces reina en las redes sociales? Solo el tiempo dirá si este nuevo enfoque será bien recibido o quedará como una simple anécdota en el camino del gigante tecnológico.