Todo parecía tranquilo en la sede de Apple, pero la calma se rompió cuando la compañía decidió llevar a los tribunales a uno de sus antiguos ingenieros. Di Liu, que trabajó durante siete años en el desarrollo del esperado Vision Pro, ahora se encuentra en el ojo del huracán tras ser acusado de robar información confidencial para llevarla a su nuevo trabajo en Snap.
La demanda, interpuesta el pasado 24 de junio en el tribunal superior del condado de Santa Clara, sostiene que Liu descargó miles de archivos internos poco antes de renunciar. Curiosamente, él alegó que dejaba su puesto para cuidar su salud y pasar más tiempo con su familia. Sin embargo, Apple apunta a que ya había aceptado una oferta con Snap Inc., justo cuando se suponía que estaba cerrando las puertas detrás de él.
Los secretos robados y las maniobras encubiertas
Lo más alarmante es cómo Liu habría gestionado esta transición. Según Apple, mientras anunciaba su partida, accedió a una enorme cantidad de documentos cruciales desde su MacBook proporcionada por la empresa. Documentos sobre diseño, pruebas y estrategias de cadena de suministro relacionados con el Vision Pro fueron supuestamente copiados y enviados a su nube personal. ¡Menuda jugada!
Consecuencias legales y defensas firmes
Aunque Snap no está siendo demandado directamente ni acusado de nada irregular, Apple sostiene que existe una notable coincidencia entre lo que Liu retuvo y sus nuevas responsabilidades laborales. En respuesta a las preguntas sobre este escándalo legal, Snap ha negado cualquier vínculo entre el litigio y lo que hace actualmente Liu.
Apple busca recuperar lo perdido. La compañía no solo quiere que Liu devuelva lo supuestamente robado; también exige inspeccionar sus dispositivos para asegurarse de que no quede rastro alguno de información confidencial. Además, persigue daños económicos por ruptura de contrato y apropiación indebida.
Este conflicto abre un debate sobre la ética profesional en el mundo tecnológico: ¿hasta dónde somos capaces de llegar por conseguir nuestro objetivo? Estaremos atentos al desenlace.