El Apple Watch es el primer smartwatch de Apple, pero no el primer reloj de la compañía
A pesar de que la creencia popular más extendida a día de hoy es la de que el Apple Watch que la compañía lanzará dentro de algunos meses, posiblemente durante el mes de marzo, es el primer reloj de Cupertino, lo cierto es que esa afirmación no es del todo verdad pues tenemos las imágenes que nos confirman que el futuro smartwatch de Apple no es el primer reloj de la compañía en ver la luz.
Para ello tenemos que remontarnos algunos años atrás, concretamente en 1995, justo dos años antes de que Steve Jobs fuese traído de vuelta para intentar salvar a la compañía de la quiebra. En aquel entonces, Apple había estado utilizando un reloj de pulsera hecho a medida con un bisel de aluminio anodizado y vidrio resistente a los roces y rayaduras como objeto de regalo para todos aquellos usuarios que actualizarán sus sistemas operativos al nuevo Mac OS System 7.5.
Así pues, a pesar de que el Apple Watch va a ser el primer reloj inteligente de la empresa de Cupertino, es evidente que no ha sido el primer reloj en ver la luz de los chicos de la manzana y aunque las diferencias entre ambos dispositivos son bastante obvias, hay que decir que en 1995 ya creó una muy buena aceptación entre los usuarios de Apple.
Te presentamos el primer reloj de Apple… ¡¡de 1995!!
Ha sido pues el conocido Youtuber Jonathan Morrison quien ha decidido crear un vídeo espectacular en el que se puede observar el famoso reloj de Apple de 1995 en perfectas condiciones. Sin embargo, a parte de contar las horas como cualquiera otro reloj, la verdad es que el primer Apple Watch de la historia es solo eso, un reloj, algo muy distante a lo que esperamos ver el próximo mes de marzo con la llegada del primer smartwatch de Apple.
Así pues, como podéis ver en el vídeo que os presentamos a continuación, el reloj que Apple lanzó el pasado año 1995 nos ofrece unos biseles de aluminio anodizado en un atractivo azul, un logotipo muy colorido de Apple (como nos tenía bien acostumbrados en aquellos tiempos), vidrio resistente a los arañazos y un cuarzo japonés.
En definitivia, una auténtica joya de coleccionista que no hace más que corroborar el hecho de que la tecnología ha avanzado a pasos agigantados en estos últimos 20 años, una auténtica radiografía de la evolución que ha pegado, no solo la compañía, sino la sociedad.
