Demasiado costoso, con poca potencia, imposible de personalizar, de ecosistema cerrado y con la forma prevaleciente sobre la función. Estos criticismos de los productos de Apple han venido creciendo a través de los años, y yacen dentro de los escollos inherentes en la aproximación singular de la compañía al diseño, la cual premia la simplicidad, estética y facilidad de uso por encima de todo.
Esa aproximación, encarnada por su cofundador Steve Jobs y ahora director de diseño Jony Ive, ha sido siempre polarizantes. Hay muchas personas a quienes nunca les han gustado los productos Apple y nunca serán de su agrado, incluyendo una amplia cantidad de “tecnófilos” o adictos a la tecnología. Sin embargo, Apple nunca han tenido problemas con ello, ya que existe una gran cantidad de personas que adoran sus productos, incluyendo a muchos que no se habían considerado como tecnófilos antes.
Por US$99, Apple lanza su Smart Battery Case para el iPhone 6S y 6S Plu
El éxito de Apple se debe en cierta forma a su tozudez. No obstante, últimamente hay signos de obstinación que pueden ser vacilantes, y con ello, la mística del diseño que ha ayudado a hacer de Apple la compañía más valiosa del mundo.
Esta semana, Apple ha lanzado un nuevo producto que intentó abordar una de las quejas más persistentes acerca del iPhone. El producto se denomina “Smart Battery Case” (Funda de Batería Inteligente) para el iPhone 6S y el iPhone 6S. Por US$99 promete proteger el dispositivo y, al mismo tiempo, incrementar la vida de su batería de 14 horas a 25 horas para llamadas o, equivalentemente, de 10 horas de navegación por internet a 18.
La batería no es precisamente una maravilla, es más cara que otras en el mercado y además su apartado estético es poco atractivo
Sin embargo, esta “funda inteligente” no es precisamente una maravilla, ni en precio, ni en funcionalidades. La nueva caja de batería de Apple tiene un coste mayor a las ofrecidas por terceros fabricantes como Mophie o Incipio, además tiene menos potencia. Tiene algunas ventajas, como la habilidad de ver cuánta batería nos queda en la funda deslizando la pantalla de nuestro terminal.
También es compatible con el cable Lightning de Apple, el cual es conveniente, asumiendo que obvies la inconveniencia en la que podemos incurrir cuando Apple nos obligue a cambiar a este tipo de cable. Sin embargo, no hay una batería externa a exhibir, y no hay forma de controlar si estás gastando batería del móvil o de la funda. Es gruesa y elástica y muestra un bulto incómodo donde va la batería. Esto hace que el iPhone luzca más como un Boeing 747 que como un smartphone.
